Oñati y Arantzazu: historia y patrimonio bajo el Aizkorri

Existen varios pueblos que por su edificios, historia y entorno, son perfectos para pasar un fin de semana espléndido. Oñati cumple todos estos requisitos. Dispone de un buen área para AC´s cerca del centro, un casco histórico bonito e interesante, y alrededor, sitios increíbles como el Santuario de Arantzazu o las cuevas de Arrikrutz.

Oñati se sitúa en el Suroeste de Gipuzkoa, en el corazón  de la cordillera de Aizkorri. Desde que supimos que tenía un área para AC´s, lo teníamos en la lista de planes para un fin de semana. Ambos conocíamos Arantzazu desde pequeños y varias veces hemos ido desde allí hasta Urbia. Pero no conocíamos mucho el pueblo, y nos ha sorprendido, ¡para bien claro!

El centro histórico

Aunque la población de Oñati aumentó en el siglo XX, el casco histórico mantiene el carácter y la elegancia de siglos anteriores. En el siglo XIII, Oñati fue nombrado Condado, y en el S. XVI se edificó allí la primera universidad de Euskal Herria. Gracias a todo esto, los jauntxos y condes
construyeron estos palacios tan elegantes que todavía mantienen su belleza.

La plaza de Fueros es el centro neurálgico del pueblo y punto de encuentro natural. Aquí se encuentra el ayuntamiento, un edificio del estilo Rococó, construido en 1.778. A su lado está la casa-torre Larrazaga, con su hermoso jardín abierto al público. En esta plaza, se hace el mercado los sábados por la mañana, con los productos típicos de la zona. A pocos metros está la Plaza de Santa Marina, que fue  la primera plaza del municipio. Y rodeándola se encuentran los palacios Madinabeitia, Antia y Baruena. Se pueden ver todas dando un paseo.


La iglesia de San Miguel

Está situada al lado de centro y la Plaza de Fueros. Es un edificio gótico del siglo XV, aunque debido al rápido crecimiento que tuvo el pueblo, tuvieron la necesidad de renovarla y ampliarla.

Además del altar, tiene la Capilla de la Piedad y Cripta del siglo XVII. Pero a nosotros, lo que más nos ha llamado la atención, ha sido el elegante claustro construido sobre el río.


Universidad Sanctis Spiritus

Este edificio de la época del renacimiento, fue la primera Universidad de Euskal Herria. Fue creado por Rodrigo Mercado Zuazola en el año 1548. Durante más de 3 siglos, se ofrecían estudios como medicina, derecho, filosofía, teología y letras. Hoy en día, es la sede de varias entidades y se realizan trabajos de archivo. 

Es un edificio deslumbrante tanto por fuera como por dentro. En la entrada, se puede ver el gran escudo del Rey Carlos I. En el interior, tiene un elegante claustro de la época del Renacimiento; también un techo del estilo Mudéjar, poco frecuente en Euskal Herria.

Para poder hacer una visita guiada hay que acudir a la oficina de turismo. 


Cueva de Arrikrutz

Habíamos oído algo sobre las cuevas de Arrikrutz, pero después de estar alli, podemos decir que es impresionante y que la visita merece la pena.  Está situada en el corazón de la cordillera de Aizkorri, en el barrio de Araotz. En total, tiene 15 Km de galerías, pero en la visita estándar se puede ver la galería 53 con una longitud de 500 metros (también se pueden hacer visitas de espeleología). Se realiza la visita a través de una pasarela, con las explicaciones de un guía. Entonces vimos que el agua del río Aldaola, perforando y filtrando la cueva siglo tras siglo, nos habia dejado unos hallazgos arqueologicos y paleontologicos como por ejemplo el esqueleto de un León de la Cavernas y huellas de oso.

La visita comienza en el Centro de Interpretación situado a 200-300 metros de la cueva. Hay que llamar para coger cita y/o consultar horarios. El precio de un adulto es de 9 euros. 


Santuario de Arantzazu

En el corazón de Euskal Herria, en la frontera  entre Araba, Nafarroa y Gipuzkoa y en el regazo de la cordillera de Aizkorri se encuentra el Santuario de Arantzazu. Este edificio dedicado a la Patrona de Gipuzkoa poco tiene que ver con el resto de iglesias y edificios religiosos. Tiene un estilo modernista y recoge varios trabajos de artistas vascos de la vanguardia, como son Jorge Oteiza, Néstor Basterretxea y Eduardo Txillida.

La Basílica empezaron a construir en el año 1950, bajo la dirección del arquitecto Sáenz de Oiza y Laorga. A primera vista, llaman la atención las tres torres con puntas afiladas que simbolizan la Trinidad. Fue obra de Jorge Oteiza, en homenaje al espino blanco, abundante en esa zona. 

Decorando la entrada, se encuentran los 14 apóstoles que tanta polémica suscitaron en su dia. Esta también es obra del artista Jorge Oteiza. En cambio los hierros de la puerta de la entrada, son diseño de Eduardo Chillida.

Una vez dentro de la Iglesia, se puede apreciar el gran retablo de Lucio Muñoz. Superficie de 600 metros y realizada con madera. En la parte de abajo de la Iglesia se encuentra la Cripta, obra de Néstor Basterretxea. Anteriormente era un sitio oscuro, siendo hoy en día una especie de galería moderna  junto a otros trabajos del mismo artista.

En el nuevo edificio que hay junto al Santuario, se encuentran el centro Gandiaga y Parketxe de Aratz-Aizkorri. Saliendo de Arantzazu, podemos llegar a los prados de Urbia: ruta de senderismo de una hora y media aproximadamente. Tiene varias pendientes, pero desde luego,  ¡ ¡merece la pena por las vistas de Urbia y pintxo de txorizo de la fonda!!


Un paseo por la historia del chocolate

La historia de Oñati ha estado siempre muy relacionada con el chocolate, y debido a ello podemos encontrar el Centro de Interpretación Txokolateixia. Allí nos explican tanto el proceso desde la siembra del cacao hasta la producción de chocolate, como la relación que ha tenido el pueblo con el Chocolate desde el S. XVII hasta hoy en dia. Así como un repaso en la historia de la empresa de Zahor y otras empresas ubicadas en Oñati. Para realizar la visita hay que llamar o escribir con antelación al Centro de Interpretación para coger cita. Al final de la visita, podréis probar y comprar el rico chocolate!!

También se puede visitar en el mismo pueblo el Molino San Miguel con origen en la edad media. Su primera mención se remonta al S. XV. Perteneció a los Condes de Oñati hasta el S. XIX. Se encuentra en la calle San Juan, en el mismo edificio de la Oficina de Turismo.


Dónde dormir en Oñati.

Oñati cuenta con uno de los mejores área de AC que nos ha tocado en estos años en Euskal Herria.

Y por ello hay que felicitar tanto al ayuntamiento como al pueblo. Se sitúa a unos 500 metros del centro, en el barrio San Martín y rodeado de un paisaje espectacular.

Dispone de 18 plazas, vaciado y llenado de aguas y también de un baño público. Al lado tiene un bonito merendero con un robledal, como un parque. Pasa por allí el bidegorri o carril bici, que nos llevará andando en 5 minutos hasta el centro. 

Como veis, Oñati es un estupenda opción para pasar un buen fin de semana. A nosotros por lo menos, nos ha sorprendido y¡¡para bien!! ¡¡Volveremos!!!

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